viernes, 11 de marzo de 2016

MORFOLOGÍA Y FISIOLOGÍA DE LOS PECES

La sensibilidad de la línea lateral permite a los peces estimar la presión, dirección y velocidad de los movimientos del agua, en un cardumen de cientos de miles de peces, ellos nadan sin llegar a tocarse.

Por ello no se deben golpear los vidrios del acuario. Un golpe sorpresivo hace a los peces actuar por reflejo condicionado, saliendo en cualquier dirección y
golpeándose contra cualquier superficie.

Además del oído mucho menos sensible que la línea lateral- los peces de acuario se valen de las células sensoriales de la línea lateral para reconocer a las personas que se acercan
 


 PARTES EXTERNAS DE UN PEZ:

Partes del pez Narina: Puede detectar olores pero no respirar.
Boca: La boca sirve para alimentarse y para que le entre agua.
Linea lateral: Es como un sexto sentido del pex. Le sirve como advertencia de algo. Le da información de sal, temperatura, corrietes, etc.
Ojo: No tiene parpados pero si una membrana nicritante.
Operculo: El limite entre la cabez y el tronco. Protege a cavidad branquial.
Escamas: El pez se encuentra cubierto por escamas de origen dermico que se disponen como las tejas de un tejado. Estan cubiertas por una sustancia que impide la friccion con el agua y evita que se desarrollen parasitos.
Musculatura caudal: Es sumamente fuerte y la usa para movel la cola caudal como un timon.
Aleta dorsal: función la locomoción lenta y la estabilidad en la natación.
Aleta anal: permiten la locomoción lenta y la estabilidad en la natación.
Aleta pelvica: tienen una función principalmente estabilizadora.
Aleta pectoral: intervienen en la locomoción lenta, los giros y el frenado.
Aleta caudal: Es usada como un timon para el pez, dirige la direccion y hacia a donde se quiere dirigir.
Vejiga natatoria: estructura membranosa ubicada debajo de la columna vertebral. Posee cuerpos rojos que cuando liberan gases la vejiga se infla, el pez disminuye el peso y se acerca a la superficie. Caundo los gases son reabsorbidos la vejuga natatoria se desinfla, el peso del pez aumenta y desciende. Este organo permite el descanso de las aletas.
Respiración branquial: La mayoría de los peces tiene 4 pares de branquias ubcadas en las camara branquiales que estan a ambos lados de la cabeza y cubiertas por el operculo.

El pez realiza movimientos coordinados para que pueda ingresar el agua a la camara branquial. Estos movimientos concisten en abrir la boca para que pueda penentrar el agua a las camaras branquiales y alli ponerse en contacto con los filamentos branquiales para que se produzca el intercambio de gases. Mientras ocurre esto, los operculos permanecen cerrads. Cuando se cumple la Hematosis, el pez cierra la boca y abre los operculos para que salga el agua. Son movimientos alterantes.
 PARTES INTERNAS DE UN PEZ:


Anatomia interna de un pez óseo: animal vertebrado que tiene aletas y cuyo la piel es recubierta de las escamas. El pez vive en agua y es generalmente ovíparo.
Cerebro: parte donde están las capacidades mentales del pez.
Esófago: parte del tubo digestivo situado entre la boca y el estómago.
Aorta dorsal: vaso sanguineo dorsal que transporta la sangre del corazón a los órganos.
Estómago: órgano del tubo digestivo situado entre el esófago y el intestino.
Vejiga natatoria: depósito en la que almacena la orina.
Médula espinal: parte del sistema nervioso que une el cerebro a todas las partes del pez.
Riñon: órgano de purificación sanguinea.
Orificio urinario: apertura relativo a la orina.
Orificio genital: apertura relativo a los órganos genitales.
Ano: orificio del tubo digestivo.
Gónada: glándula sexual del pez.
Intestino: última parte del tubo digestivo.
Ciego pilórico: conducto relativo al intestino.
Vesícula biliar: saco pequeño que contiene la bilis.
Hígado: glándula digestiva que hace la bilis.
Corazón: órgano de la circulación sanguínea.
Branquia: órgano respiratorio del pez.
Diente: órgano duro del pez que sirve a masticar los alimentos.
Ojo: órgano de la vista del pez.
Bulbo olfativo: parte abultada del órgano de la percepción de los olores.

 




 Tipos de alimentación

La alimentación de los peces es muy diversa. Según sus hábitos alimenticios podemos clasificarlos básicamente en tres grupos:
  • Herbívoros: son muy pocos, tanto en aguas dulces como marinas. Comen algas y plantas marinas.

  • Carnívoros: son aquellos que se alimentan de gusanos, de cangrejos, de otros peces o de insectos y moluscos. Son los tiburones o los atunes, entre otros.

  • Omnívoros: los que se nutren de animales y vegetales.


El régimen alimentario de las larvas o juveniles suele ser muy distinto al de los adultos. La mayoría de larvas se alimentan de zooplancton, mayoritariamente de rotíferos, copépodos y cladóceros.


Reproducción de los peces. La reproducción de los peces y los anfibios está estrechamente relacionada con el medio acuático. Los peces viven siempre en el agua, mientras que los anfibios nacen en el agua y vuelven a ella para reproducirse. La mayoría de los peces se caracteriza por su fecundación externa y reproducción ovípara. Los anfibios nacen como una larva acuática que se desplaza con una cola y respira mediante branquias. Cuando esta larva, llamada renacuajo, ha crecido lo suficiente, sufre un proceso de metamorfosis. Desarrolla patas y pulmones y pierde la cola y las branquias
En la reproducción de los peces encontramos tres patrones generales muy bien definidos, los vivíparos, los ovovivíparos y los ovíparos.

  • Los vivíparos son aquellos que "paren" a su cría ya como juveniles completamente formados. El requerimiento del proceso de fertilización interna es una característica de especialización obligada en este grupo. Entre todos los peces que actualmente existen, hay 40 familias con unas 420 especies de los Elasmobranquios o Peces cartilaginosos que son la mayoría, que poseen esta estrategia vivípara de reproducción, por ejemplo: tiburones, rayas. Los machos de estos grupos poseen una modificación de sus aletas ventrales en forma de órgano copulador, que les sirve para transferir los espermatozoides durante la fertilización interna. En los Osteictios o Peces óseos encontramos la viviparidad en 13 familias, con aproximadamente 510 especies representadas.

  • Los ovovivíparos (que también requieren de fertilización interna), son aquellos donde los huevos son retenidos por la madre hasta la eclosión, pero la nutrición del embrión no depende de la madre sino del vitelo del huevo. Esta estrategia reproductiva no es muy común en los peces marinos. Se dice que representantes de la familia Scorpaenidae (rascacios) poseen este tipo de reproducción. La familia Poecilidae (guppies, mollies y platies) tiene representantes tanto de aguas dulces, salobres así como en aguas marinas. En este grupo encontramos que en los machos es la aleta anal "Gonopodio" la que se modifica para introducir los espermatozoides en la cavidad ovárica de la hembra.

  • La gran mayoría de los peces marinos son ovíparos. En éstos, los huevos son expulsados al medio y la fertilización es externa. Aunque, en raras ocasiones, pueden suceder eventos donde ocurra fertilización interna antes del desove.

    Formas de reproducción

    En la reproducción de los peces encontramos tres patrones generales muy bien definidos, los vivíparos, los ovovivíparos y los ovíparos.
  • Los vivíparos son aquellos que "paren" a su cría ya como juveniles completamente formados. El requerimiento del proceso de fertilización interna es una característica de especialización obligada en este grupo. Entre todos los peces que actualmente existen, hay 40 familias con unas 420 especies de los Elasmobranquios o Peces cartilaginosos que son la mayoría, que poseen esta estrategia vivípara de reproducción, por ejemplo: tiburones, rayas. Los machos de estos grupos poseen una modificación de sus aletas ventrales en forma de órgano copulador, que les sirve para transferir los espermatozoides durante la fertilización interna. En los Osteictios o Peces óseos encontramos la viviparidad en 13 familias, con aproximadamente 510 especies representadas.

  • Los ovovivíparos (que también requieren de fertilización interna), son aquellos donde los huevos son retenidos por la madre hasta la eclosión, pero la nutrición del embrión no depende de la madre sino del vitelo del huevo. Esta estrategia reproductiva no es muy común en los peces marinos. Se dice que representantes de la familia Scorpaenidae (rascacios) poseen este tipo de reproducción. La familia Poecilidae (guppies, mollies y platies) tiene representantes tanto de aguas dulces, salobres así como en aguas marinas. En este grupo encontramos que en los machos es la aleta anal "Gonopodio" la que se modifica para introducir los espermatozoides en la cavidad ovárica de la hembra.

  • La gran mayoría de los peces marinos son ovíparos. En éstos, los huevos son expulsados al medio y la fertilización es externa. Aunque, en raras ocasiones, pueden suceder eventos donde ocurra fertilización interna antes del desove.

Fecundación externa

En la mayoría para la reproducción de peces, la fecundación es externa, o sea, tiene lugar fuera del cuerpo de la hembra. Esta deposita sus huevos en un nido o los abandona al capricho de las corrientes oceánicas. Para que estos huevos sean fecundados, resulta indispensable que el macho vierta su esperma sobre ellos en el momento oportuno. Un cierto número de especies de la familia de los lábridos efectúan la freza de esta manera tan poco segura tras haberse reunido en bancos durante algunas horas en los parajes de sus arrecifes originarios. Periódicamente, de cinco a quince machos y hembras se destacan del conjunto de sus congéneres, se unen estrechamente unos a otros y nadan al unísono hacia la superficie. Cuando se encuentran alrededor de 1,80 metros por encima del grueso del pelotón, liberan en las aguas esperma y óvulos, dejando al azar la tarea de unirlos y fecundarlos... La fusión de los óvulos y los espermatozoides debe producirse en décimas de segundo, por no decir en el mismo instante, porque cualquier corriente es susceptible de dispersar las células sexuales y hacer imposible la fecundación y por consiguiente la reproducción de peces. Los grandes conjuntos reproductores están compuestos sobre todo por especies que siembran al desgaire unos huevos cuyas oportunidades de ser fecundados son ínfimas, y enorme el riesgo de sucumbir a la depredación. Pero estas especies, cuya descendencia parece más comprometida que la de los animales que velan por su prole, son también extraordinariamente pródigas en células sexuales. Compensan así, por el número, la falta de solicitud paterna, si bien las oportunidades acaban siendo iguales por ambos lados. Esta es una ley general que no se aplica solamente para la reproduccion de peces. Los Hálanos y las Ostras, por ejemplo, derivan a merced de las olas en el curso de su estado larvario, antes de establecerse en vastas colonias. Los Mejillones azules viven en bancos de varios millares de individuos en las aguas costeras poco profundas de América y Europa. En la época de la freza, las hembras expulsan sus óvulos en las aguas, señal química que desencadena en los machos la emisión del esperma, que va a fecundar los óvulos planctónicos a la deriva. Efectuar la freza en grupo y producir cantidades astronómicas de huevos son aquí modalidades puramente instintivas del comportamiento, que garantizan la fecundación y, por ello mismo, la perpetuación de la especie. 

Ampolla de Lorenzini


Electrorreceptores (Ampolla de Lorenzini) y los canales de la línea lateral en la cabeza de un tiburón.
Las ampollas de Lorenzini son órganos sensoriales especiales, formados por una red de canales con electrorreceptores cubiertos con una sustancia gelatinosa, encontrados en los Condrictios (tiburones, rayas y quimeras). El italiano Marcello Malpighi descubrió las ampollas de Lorenzini, que serían descritas por primera vez de modo detallado en 1678 por el médico italiano Stefano Lorenzini. La importancia de estas radica en detectar los campos electromagnéticos. Los tiburones, por ejemplo, las usan para encontrar a sus presas, para seguir la corriente del agua puesto que si van en contra de ella se cansaran fácilmente.
 Camuflaje

El mundo submarino está plagado de preciosos animales que tienen que luchar cada segundo para sobrevivir. Tanto para obtener alimento como para no ser comidos por otros, la evolución ha regalado a muchas especies una extraordinaria capacidad para confundirse con el entorno que les hace la vida más sencilla. Este es nuestro top 10 de animales submarinos que más han desarrollado su capacidad de camuflaje para sobrevivir.

1. Pez sapo

Pez sapo estriado
Pez sapo con señuelo
Pez sapo
Pez sapo tratando de pasar desaparecido entre las esponjas y corales. Imagen de JennyHuang 
Los peces sapo habitan las regiones tropicales y subtropicales del Atlántico, Pacífico, Índico y Mar Rojo siendo muy populares en Bali y el Estrecho de Lembeh, en Indonesia. Su forma, textura y colorido simula los arrecifes coralinos y fondos arenosos donde viven y, plantados en la superficie durante horas, esperan que un incauto se acerque lo suficiente para engullirlo con su enorme boca. Dentro de la familia de los peces sapo encontramos unos curiosos miembros que han desarrollado un apéndice en su cabeza que utilizan como señuelo y así para acercar a sus presas a su boca, un auténtico prodigio de la evolución.

2 Caballito de mar pigmeo

caballito de mar pigmeo
Caballito de mar pigmeo

El más pequeño de los caballitos de mar es un frágil y lento nadador que solo tiene una oportunidad para sobrevivir en el arrecife: pasar desapercibido. Su estrategia es imitar su único hábitat, las gorgonias, y parecerse lo máximo posible a ellas simulando en su cuerpo incluso los pólipos de este cnidario. Podemos verle, si tenemos la vista entrenada, en arrecifes de alrededor del Triángulo de coral: Filipinas, Indonesia, Papúa Nueva Guinea o Aus

3 Tiburón Wobbegong

Tiburón wobbegong
Tiburón alfombra
El tiburón wobbegong o alfombra se pasa el día asentado en el fondo marino prácticamente invisible gracias al color de su piel y aplanada forma de su cuerpo. Simulando su entorno, tanto rocas como fondos arenosos e incluso corales, espera el momento para cazar a todo aquel que pase a su lado para engullirlo con su enorme boca. Conocido como “el tiburón come tiburones”, habita fondos poco profundos del Pacífico e Índico, principalmente en Australia e Indonesia.

4 Pez piedra

pez piedra
Pez piedra
El pez piedra es el pez más venenoso del océano. La finalidad de su excelente camuflaje, simulando en textura y color de las rocas de poca profundidad de la costa, es la de ser invisible ante sus presas (es un pésimo nadador) y depredadores. Cuenta con trece aguijones en la aleta dorsal que inoculan una neurotoxina fatal incluso para los seres humanos. Puede ser pisada confundiéndolo con una roca causando un intensísimo dolor y, sin un urgente tratamiento, la muerte. Es muy común en Australia, donde cada año 25 personas tienen que ser tratadas de urgencia ante las picaduras de este pez. 

5 Gambas

Gamba transparente
Gamba emperador sobre nudibranquio
Las gambas son demasiado pequeñas, frágiles y apetecibles como para no ser deseadas por cualquiera de los habitantes del arrecife. Dos de las gambas que mejor han conseguido adaptarse para sobrevivir son la gamba comensal de las anémonas, que tiene el cuerpo transparente haciéndola prácticamente invisible, y la gamba emperador, que vive sobre los venenosos nudibranquios de los que incluso "imita" el colorido para no ser descubierta.

6 Lenguado

Lenguado
Lenguado


Los lenguados son unos maestros del camuflaje que evitan ser detectados por sus presas y depredadores "copiando" la forma y colorido del fondo arenoso donde viven. Una de las familias de lenguado, el Bothus mancus, tiene la capacidad de cambiar de color en tan sólo ocho segundos si el nuevo escenario requiere otro camuflaje.

7 Gobio biocelado

Gobio biocelado
Gobio biocelado

El pequeño gobio biocelado tiene pocas posibilidades de sobrevivir ante el ataque de un pez más grande… salvo que intente amedrentarle pareciendo mayor. Cuando se siente amenazado despliega su aleta dorsal donde un par de “ojos” que simulan ser los de un pez de mayor tamaño miran fijamente al adversario haciéndole pensarse dos veces el ataque. Podemos encontrarle desde Filipinas hasta las Islas Salomón, Vanuatu, el sur de la Gran Barrera de Coral y Palaos (Micronesia).

8 Pez pipa fantasma

Pez pipa fantasma decorado
Pez pipa fantasma robusto


Los peces pipa fantasma están emparentados con los caballitos de mar y, haciendo honor a su nombre, son capaces de que no te des la más mínima cuenta de que los tienes al lado. Estos peces se mecen en la corriente marina simulando ser corales o algas para no ser engullidos. Para completar su camuflaje están decorados con formas y colores que imitan los pólipos del coral o vegetación. Habitualmente se encuentran en posición vertical, lo que da mayor credibilidad a su disfraz.

9 Pez escorpión

Pez escorpión hoja meciéndose en la corriente
Pez avispa cacatúa
El pez avispa cacatúa pasa por ser una inerte hoja. Imagen de divemecressi
Entre la numerosa familia de peces escorpión hay dos ejemplares que han conseguido parecer inertes para no llamar la atención en los fondos fangosos de Indonesia. Tanto el pez escorpión hoja como el pez avispa cacatúa tienen forma de hoja desprendida y pasan su vida apoyados en el lecho marino siendo mecidos por la corriente. Son muy buscados en el reino del muck diving, el Estrecho de Lembeh en Indonesia.

10 Pulpos

Pulpo mimo
Pulpo mimo o imitador simulando una o varias serpientes marinas. Imagen de madasamarinebiologist
Impresionante vídeo sobre la capacidad de los pulpos para confundirse con el entorno
Dejamos los pulpos para el final porque sin duda son los reyes del mimetismo marino. Los cefalópodos son los animales más inteligentes del océano, capaces de imitar texturas, colores, formas e incluso la forma y comportamiento de otros animales, como el pulpo mimo o imitador, que con su cuerpo simula la forma de venenosos seres como la serpiente marina o el pez león para tratar de confundir a sus depredadores.
 Sistema de ecolocacion
ecolocación (del prefijo eco-, este del latín echo, y este del griego ἠχώ [ejó], ‘sonido reflejado’, y el latín locatĭo, ‘posición’)1 2 o ecolocalización,3 a veces también llamadabiosonar, es la capacidad de algunos animales de conocer su entorno por medio de la emisión de sonidos y la interpretación del eco que los objetos a su alrededor producen debido a ellos. «Ecolocación» es un término creado en 1938 por Donald Griffin, que fue el primero en demostrar concluyentemente su existencia en los murciélagos.4

Varios mamíferos poseen ecolocación: los murciélagos (orden Chiroptera —aunque no todas las especies del orden la usan—), los delfines (familia Delphinidae) y el cachalote(Physeter macrocephalus). Las aves que utilizan este sistema para navegar en cuevas sin visibilidad son el guácharo (Steatornis caripensis) y los vencejos y salanganas(familia Apodidae), en especial la salangana papú (Aerodramus papuensis), de la tribu Collocaliini